Los padres pierden el control con extremada facilidad, que fácil dar un grito si el pequeño no logra los objetivos de inmediato, después de un rato un coquito por la premura del representante de que el niño aprenda.
Si queremos formar un matemático, un lector asiduo o un universitario seguro, hay que cuidar el trato de los estudiantes al momento del aprendizaje en todo tiempo y sobretodo en la iniciación del pequeño.
En los niños maltratados al momento de aprender a leer queda el trauma por el maltrato por lo que cada vez que lea va a sentir la misma sensación y emoción negativa que le produjo aquel momento y sin darse cuenta rechazará leer, empezará y no terminará, no le provocará leer los letreros en las calles ni querrá leer en público y si en el futuro quisiera sacar una licenciatura tendrá que obligarse a sí mismo a aplicarse al estudio porque no le será agradable.
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